Es increible cómo tu vida rutinaria puede cambiar en un instante, por alguno o varios eventos que se puedan suscitar, he tenido experiencias de personas queridas muy cercanas que pueden dar fe de elloy que están asumiendo la pérdida de alguien muy especial. El Sr. Curvelo nos dejó el día del amor y la amistad, sin dejar todos sus pendientes listos y así sin ton ni son. Siempre dispuesto, alegre y por sobre todo apoyando en cualquier "favorcito" que le pidiera mi mamá. Fueron 14 años de compañerismo, de confidencias, riñas, pero por sobre todo de mano amiga. Esto dejó a mi mamá en un shock del cual aún no ha salido, pero del que estoy segura y es mi mayor esperanza, que este bajón el cual tuvo como detonante la muerte de un amigo, viene de mucho más atrás, pero me queda la fe que de esta situación algo bueno saldrá, pues a veces es necesario tocar fondo y enfrentar nuestros miedos y desnudar todo lo que llevamos dentro, eso que nos reprime y no nos permite realmente alcanzar y seguir nuestro camino. DEPRESION que fácil decirlo, y qué dificil es salir de ella, el alma se pone triste y nada te motiva, sólo un desaliento y falta de esas ganas para seguir adelante. Tengo que apoyarla, y no queda otra, sino darle todo mi apoyo y cariño, y esperar a que todos los esfuerzos surtan efecto. Terapia y más terapia, yo también decidí tomarla para no dejarme llevar por esta tempestad, que no deja de asustarme y en la que no quiero verme arrastrada, hoy así lo siento es muy malo ser hijo único. Tenemos personas a nuestro alrededor que se preocupan y dan sus palabras de aliento pero cada quien debe continuar con sus vidas propias, por lo menos uno sabe que están allí para escuchar y darnos fuerzas.
La vida sigue y vendrán tiempos mejores, tiempos de alegrías y de satisfacciones.
¡Dios lo bendiga Sr. Curvelo, que su moto lo lleve de nube en nube a pasear, descansar y disfrutar de esa mejor vida que nos merecemos y nos tocará allá en el cielo! Mil gracias por todos los favores recibidos...